Qué pueden hacer las semillas de sandía por tu cuerpo, en lugar de tirarlas

En los días calurosos, un gran trozo de sandía es el refresco correcto. La fruta dulce consiste en un 90% de agua y apenas contiene calorías. La mayoría de nosotros saca las semillas de inmediato o compramos la versión sin semillas de una vez. Lo mejor de la fruta está aquí, lo que hace que las semillas sean mucho más valiosas de lo que piensas.

Muchas personas se molestan por las semillas y de inmediato las sacan.

Semillas de sandía
La carne de la sandía consiste en 90% de agua. Aunque las vitaminas y los oligoelementos se encuentran en el 10% restante, lo mejor de la fruta está en sus semillas. Estas contienen vitaminas A, B, B3 y E, así como ácidos grasos omega-6 y proteínas. También minerales como magnesio, calcio, zinc, potasio y hierro están contenidos en ellas. Como puede ver, son súper saludables.

Saludable
Además de los muchos ingredientes saludables, las semillas de sandía también tienen otros efectos en el cuerpo que promueven la buena salud. Aquí unos ejemplos, entre otros:

Laxante: tienen un efecto drenante sobre el cuerpo y pueden ayudar de manera muy efectiva con el estreñimiento.
Limpieza: limpian el cuerpo y tienen un fuerte efecto deshidratante. Como resultado, eliminan los depósitos que pueden conducir a cálculos renales. En general, mejoran la función renal y también son muy útiles para la presión arterial alta.
Revitalización: contienen licopeno, un antioxidante que desintoxica y revitaliza su cuerpo.
Hay varias formas de consumir semillas de sandía.